
Dieciséis niños costarricenses tienen una oportunidad única: representar al país en el Campeonato Centroamericano de Tenis de Mesa U-11 y U-13, que se disputará en Belice del 4 al 9 de agosto. El talento y el esfuerzo ya los llevaron a ser seleccionados, pero ahora enfrentan otro reto fuera de la mesa: reunir el dinero necesario para poder competir.
La selección nacional de Tenis de Mesa se definió luego de un proceso que incluyó controles, campamentos y torneos internos entre los mejores de cada categoría. Quedaron los que demostraron mayor rendimiento y consistencia, y ahora forman parte del grupo que competirá en las modalidades de individual, dobles y mixtos.
Los jóvenes seleccionados son:
Sub-11 Masculino: Rodolfo Chaves, Mikel Mora, Benjamín Quirós, Isaac Gutiérrez
Sub-11 Femenino: Brenda Herrera, Abigail Quirós, Lía Solís, Ariana Sánchez
Sub-13 Femenino: Jaydelinne Baker, Galilea Muñoz, María Fernanda Zeledón, Mariana Soto
Sub-13 Masculino: Gabriel Corrales, Luciano Quirós, Isaac Rivera, Caleb Cascante
Aunque la ilusión es enorme, el viaje tiene un alto costo. Las familias deben cubrir boletos de avión, inscripción al torneo, el pago de entrenadores y un paquete logístico que incluye hospedaje, alimentación y transporte interno durante aproximadamente 9 noches, con un costo de $90 cada noche por niño.
Para muchos padres, la situación económica representa un desafío. Sin embargo, eso no ha detenido sus ganas de ver a sus hijos cumplir este sueño. Han organizado ventas de comida durante los rankings nacionales, rifas, bingos y hasta buscan patrocinios. Cuatro de estos padres también acompañarán al grupo, asumiendo sus propios gastos.